Hoy se cumple un año de la declaración del Estado de Alarma en nuestro país. Un año de Pandemia, al menos según palabras oficiales. Es cierto que el virus ya estaba circulando por España en febrero o enero y en otros países del mundo, pero fue exactamente hace un año cuando nos dimos de bruces con la realidad y nos dimos cuenta de que todo era real e infinitamente más grave de lo que parecía. Tuvimos un confinamiento muy severo y es cierto que el resto del año hemos tenido un régimen de semi-libertad (como en prisión), pero que este Covid19 nos ha cambiado la vida por completo. Os contamos cómo lo hemos llevado y cómo seguimos conviviendo con el virus.
Everdred
Un año atípico, con una Pandemia que no vimos venir. Nadie, absolutamente nadie, excepto la propia historia, sabía que durante este principio de siglo 21 nos tenía preparado algo así. Esto ha provocado un cambio radical en nuestras vidas y nuestros proyectos. Afortunadamente por la parte del trabajo, servidor no ha sufrido ni un sólo recorte ni de sueldo, ni de trabajo per se. No he sufrido los terribles ERTE ni los aun más terribles despidos. Me siento tremendamente afortunado por ello y espero que siga siendo así. El teletrabajo ya se estaba asentando en mi empresa y, pese a que ha tenido que ser completo de un día para otro hace ya un año, nos hemos podido adaptar de forma más o menos sencilla y todo sigue adelante más que bien.
En lo que respecta a los proyectos personales, como pudiera ser este blog, la cosa no ha ido tan bien. Como ya os comenté en la entrada de Balance del año 2020, el blog debía gran parte de sus visitas e ingresos a los eventos de manganime y videojuegos. Debido a la pandemia esto se ha cortado de raíz. La parte económica no me molesta seguir costeándola yo mismo, ya que es mi proyecto personal y eso siempre requiere una inversión de esfuerzo y dinero sin «aparente» recompensa. Digo «aparente» ya que la recompensa más valiosa son las visitas y el feedback. Y esto último ha costado mucho mantenerlo durante 2020 y este 2021 no pinta mucho más prometedor. Sin embargo, lo que va de 2021 estoy muy orgulloso del trabajo que le estoy dedicando, ya que en los escasos dos meses y medio que llevamos de año he escrito entradas extensas y muy trabajadas cuyo resultado me ha dejado realmente satisfecho.

En cuanto a la vida personal, es donde la ola pandémica que ha asolado al planeta me ha causado mayor daño. Por fortuna no me ha tocado ni a mí ni a nadie demasiado cercano el dichoso virus, pero eso no quita que en lo emocional sí que me haya causado un gran dolor. Ha ido por rachas y en este preciso instante estoy pasando una de las más duras. Esta tercera ola me está afectando más duramente que las dos anteriores. Después de disfrutar de un verano bastante aceptable y con cierta libertad, tras una primera ola realmente dura, a partir de octubre todo se truncó y fue a peor. Ahora llevamos más de 5 meses de cierre y se me está haciendo muy cuesta arriba, tal vez demasiado. Ya no sólo por no poder ver a mi pareja, con quien comparto blog, que también, sino que no tener movilidad me elimina de un plumazo los viajes a otras ciudades a tiendas frikis. Unos viajes que me suelen ayudar a desconectar mucho de la tristeza que el virus ha traído a nuestras vidas. Y no sólo viajes a ciudades relativamente cercanas, sino también a otras más lejanas, como Madrid, Barcelona u Oviedo en temporada de eventos. Si ya los eventos de por sí eran una manera inmejorable para desconectar del estrés laboral, el viaje en sí, con un día de más para dedicarlo exclusivamente a turismo videojueguil por dicha ciudad, era la guinda para un fin de semana perfecto de desconexión. Algo que lleva un año sin suceder.
En cuanto a los videojuegos o hobbies per se, la cosa ha sido brillante, claro, si todo lo demás falla no queda más cojones. Ha sido un año donde he jugado mucho, diría que demasiado. Mi consola Nintendo Switch ha marcado 1700 horas de juego durante 2020, algo que habla por sí sólo. Me habéis visto comprar más videojuegos que nunca, superando casi cada mes mi límite mensual. Me he pasado decenas y decenas de videojuegos, desde indies realmente cortos pero geniales como Aggelos, hasta obra maestras realmente extensas como Xenoblade Chronicles Definitive Edition, pasando por los inigualables Bioshock. Un año también en el que he visto bastantes películas y series y entre ellas he conocido joyas como Recuerdos de la Alhambra o Sweet Home. Por temas sanitarios apenas he podido ir al cine, algo que me apena ya que me encanta echar la tarde tirado en la butaca comiendo palomitas. Sí que he comprado mucho Manga y Libros y actualmente estoy devorando Play Historia: Los 50 videojuegos que cambiaron el mundo de Marc Rollán.
Por mi parte poco más, espero que los que nos leéis hayáis podido sobrevivir, gracias a los hobbies, contra el daño emocional que este dichoso virus, que ya dura más de un año, nos está causando. Cuidaos mucho.
Revy
Bueno, Revy está hasta el moño de la pandemia. Ha sido una temporada complicada, con muchos cambios, idas y venidas. Hace un año, me pilló justo a punto de acabar mis estudios, con el comienzo de unas prácticas que me hacían especial ilusión. Pero empezaron los problemas y a pocos días de empezar, me las habían cancelado, estaba encerrada en casa y sin poder hacer nada.
Así que me vi con un trabajo de fin de ciclo sobre eventos, con empresas, ayuntamientos y personal confinado, por lo tanto sin poder contactar con nadie, saber nada en absoluto e intentar hacer algo. Pero salió bien, mucho mejor de lo que podría haber sido, acabe muy contenta y con muchas ganas de continuar con mis estudios superiores.
Y llegó el verano. Con el movimiento que no había tenido en el confinamiento, empecé a tener mucho que hacer, algún que otro plan, pude ver a gente y llegó, por fin, una racha buena. Para casi todo menos para la ansiedad, he de decir.
Y con ella, el trabajo. Por fin, algo que hacer, que me tuviera entretenida. Muchos ya sabéis que, hasta que salga algo mejor, me dedico a los eventos, soy azafata o auxiliar de servicios y por supuesto, sin conciertos, espectáculos, deportes… No hay nada que hacer. Pero en junio pude empezar con algo parecido y me dio la oportunidad de estar entretenida, ganar algo de dinero, esas cosas.
Pero el trabajo, el comienzo de los estudios, el empeoramiento de la pandemia, me quito tiempo. Mucho. Así que, todo lo que había jugado durante el confinamiento, como el Transistor o mi paliza con el Assassin’s Creed, en un momento no pude jugar nada. Pero mira, pude empezar otra cosita, el rol en vivo… Por Discord. Bueno, yo he jugado en mesa, me encantaba, pero claro, ya no te puedes juntar, esto lo otro… Pues unos amigos me invitaron a una partida. Y aquí estoy, 8 meses más tarde con una campaña interminable, encantadísima, entretenidísima y muy contenta.
Pero el contenido audiovisual pues ocupó su lugar, porque me lo podía poner de fondo y me era más cómodo. Y vi la maravilla de Sanditon, sobre la obra inacabada de Jane Austen y la gran sorpresa que fue la miniserie de la BBC One sobre Los Miserables. Mi intención es hablaros de ella, pero bueno, ya llegaremos.
En diciembre volví a esa vena videojueguil, me compré The Witcher 3 y madre de Dios, os vais a comer una reseñita como vamos (te amo Anna Henrietta). Fue retomarlo y encantada.
Ahora bueno, aquí estoy con mis carreras, con mis cosas y aguantado. Cada día hay más ganas de que esto mejore la verdad. Tenemos planes de viajar que con la pandemia se vieron truncados, aunque pudimos irnos a Oviedo y Gijón y yo incluso pude escaparme a Vigo. Eso fue muy agradable. Pero esperamos que todo vaya a mejor.
Así que bueno, no tengo mucho más que decir, no hay más cambios ni más que comentar. Aunque antes de darlo por finalizado me gustaría decir algo más. La pandemia está dejado muy tocada la salud mental. Y si os sentís mal, no sois los diferentes, no hay nada raro en vosotros. Pedid ayuda siempre y habladlo. Os lo digo porque, si ya había un problema previo, las cosas van mal, pero la situación excepcional puede sacar a flote cosas nada agradables.
Así que hasta aquí puedo deciros, me gustaría que esto pasase cuanto antes, así que deseamos que esa vacuna vaya proliferando y nos podamos salir de esta.
Y vosotros…
¿Cómo habéis llevado este año de Pandemia?
Insistimos en el mensaje de las autoridades. No bajemos la guardia, lo más duro ya ha pasado, el segundo año no será tan duro como el primero, ahora ya conocemos al virus. Tenemos que seguir teniendo extremo cuidado y no confiarnos, no podemos dejar que se siga multiplicando, ni mucho menos evolucionando, mientras empezamos su lento pero efectivo exterminio con las vacunas.
Por parte del Blog tenemos una sorpresa preparada. Ya os comentamos al final de la entrada de Balance del año 2020, que se estaba cocinando un Rebranding completo de nuestra marca Los Mundos de Gaelia tanto en apariencia como en imagen en el Blog y en las Redes Sociales. Pues bien, la espera ha concluido. Una artistaza que dibuja genial, la cual tendrá su merecido reconocimiento, nos ha creado el nuevo avatar y logo y no podríamos estar más contentos. Sí, ya es oficial, el viernes 19 se cerrará el Blog y se abrirá de nuevo con una entrada en la que presentaremos todos los cambios y novedades. Esperamos que os guste, esta entrada, la que estáis leyendo, será la última antes del cierre. No asustarse, las demás seguirán el mismo formato que hasta ahora, simplemente variará el aspecto del blog, navegabilidad, cabecera y demás, así como las marcas de agua.